Violencia de Género
Tomando como referencia las reflexiones internacionales en torno a la violencia de género, y desde el convencimiento de la necesidad de una lucha activa desde todos los ámbitos sociales, políticos, económicos y culturales, que permita la superación de los actuales obstáculos que dificultan o imposibilitan la igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres, España aprueba, por unanimidad de todos los grupos parlamentarios, la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género.
Esta ley, en su artículo 1.1., define la violencia de género como manifestación de discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia, y comprende todo acto de violencia física y psicológica, incluidas las agresiones a la libertad sexual, las amenazas, las coacciones o la privación arbitraria de libertad.
¿Qué puedes hacer si crees que estás sufriendo violencia de género?
Lo primero es saber que no estás sola.
Que hay toda una serie de recursos cuyos mecanismos tienen por objetivo la protección, la seguridad y la asistencia a las personas víctimas de comportamientos violentos y vejatorios dentro del ámbito familiar y afectivo, así como a los hijos e hijas de las mismas.
Existe un teléfono gratuito de información y asesoramiento jurídico, 016, en materia de violencia de género, en funcionamiento las 24 horas del día, en el que serás atendido por profesionales especializados en la materia, y en 51 idiomas diferentes.
Otros teléfonos de interés:
112 emergencias
900 20 20 10 ANAR, ayuda a niños y adolescentes en riesgo.
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad tiene a disposición una WEB de recursos de apoyo y prevención frente a casos de violencia de género, WRAP violencia de género, donde puedes localizar los recursos policiales, de atención y asesoramiento más cercanos al domicilio de la víctima.
En ningún caso se puede justificar al agresor, ni responsabilizar a la víctima, en la falsa creencia de que los actos de violencia sean provocados por quien los sufre, y ejercidos por aquellos que abusan del miedo, la culpa, la vergüenza, la dependencia económica y a falta de apoyo y comprensión de quienes lo sufren.
Es fundamental tener presente que la violencia de género es un problema social, y un delito público. Donde todos tenemos la obligación de denunciar a las autoridades para que así se activen los mecanismos de protección a las víctimas, y esos comportamientos no queden impunes.
La formación en esta materia de los abogados del despacho se ha llevado a cabo desde la concienciación del problema y la pericia aportada por los cursos de formación recibidos y aplicados a los múltiples casos resueltos a lo largo de la trayectoria profesional de los mismos, en las diferentes instancias judiciales.